Makelismos Brand está llevando a cabo, de la mano de René Mäkelä, uno de los proyectos artísticos más ambiciosos de su historia. También de la historia de Miami que, gracias al empeño por dejar un legado en la ciudad del empresario Moishe Mana, está rehabilitando todo Downtown con una propuesta residencial, gastronómica, de ocio y artística nunca antes vista.
Ahí Mäkelismos tiene la misión de cambiarle la cara a una zona mítica, clásica, que se va a convertir en pocos meses en la referencia de la ciudad. En el marco de este ambicioso proyecto, estamos llevando a cabo diferentes acciones artísticas de gran formato que incluyen la realización de diferentes murales en edificios representativos del centro.
Se trata de obras clásicas que rompen con el estilo contemporáneo de otras zonas de Miami, como Wynwood, y que, además de embellecer, pretenden representar la importancia de mantener y revitalizar lo antiguo, lo clásico. En este caso, la parte más clásica de una gran urbe como Miami.
En este trabajo, que comenzó en 2024 y que tendrá continuidad durante todo 2025, la primera pieza ya está terminada. Se trata de La Joven de la Perla, una de las obras maestras de Johannes Vermeer que ahora también lo es de René Mäkelä, quien ha conseguido reflejar todos los matices a la perfección... pero a una escala descomunal. Desde el pasado mes de diciembre la cautivadora y enigmática mirada de esta joven preside una de las manzanas más representativas del centro, y que puede verse desde diferentes puntos de la metrópoli, incluido el tren aéreo que recorre la almendra central.
El segundo mural ya está en marcha y supone un nuevo reto artístico al tratarse de un mural tres veces más grande que este primero. Ese edificio ya guarda un lugar privilegiado reservado para la Mona Lisa.
Después vendrán muchas más creaciones artísticas alrededor de la almendra central de Miami, que irán avanzando al mismo ritmo que las obras de adecuación de las aceras y de la llegada de chefs de primer nivel y propuestas de ocio innovadoras.
Downtown Miami va a cambiar para siempre y, en ese cambio, la mano de Mäkelismos tendrá mucho que ver.
